domingo, 2 de agosto de 2009

Novatos en el área de vinos y sin idea de qué comprar

(Original NdV En el supermercado - Caracas 22/05/09)

Siempre me gusta quedarme un rato viendo a la gente tratando de escoger una etiqueta entre las más de 100 marcas que se ofrecen en el área de vinos de los supermercados grandes. Aunque siempre siento el impulso de preguntarles y ver si puedo ayudar, prefiero aplicar la de los científicos de National Geographic y sólo ver (no sea que salga con las tablas en la cabeza). Es interesante porque, como leen en voz alta, uno puede escuchar que casi todos tienen los mismos criterios. La secuencia del ritual es más o menos esta:
  1. Quiero algo suave.

  2. Cepas a buscar: Cabernet Sauvignon si es tinto, Sauvignon Blanc si es blanco.

  3. Tomo una botella, la suelto y agarro otra.

  4. Que sea chileno. “Debe ser bueno. Es de Chile”.

  5. “Ah no, pero mira el precio. Que va, busca otro”.

  6. “Este…Malbec. Argentina… ¿Precio?” Suelto botella.

  7. “Mira, creo que este es el que tomamos la otra vez. Es rico”. (Casillero del Diablo o Castillo de Molina).

  8. Botella al carrito y fin del ritual.
Este es el mismo baile una y otra vez para muchos consumidores. Aunque no tengo nada en contra de esas dos grandes marcas, sí tengo algo en contra de la rutina porque no nos deja ver más allá de nuestras narices. De vez en cuando, es bueno variar las cosas.

En fin, cuando estés en el supermercado y no sepas qué comprar, te propongo algo. Compra el Casillero o Castillo de siempre, pero además compra una marca o una uva de la que nunca hayas oído o que nunca hayas probado. Sin mucho análisis, compra la etiqueta más llamativa o más bonita, compara y nos cuentas.

El Novato

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